LA PLAYA
Oía voces a lo lejos, retazos de charlas y risas cómplices. Sin poder abrir los ojos del todo, adivinaba el montón de arena con pretensiones de castillo y al fondo, el calor cegador que atravesaba sus párpados semicerrados. No recordaba desde cuando llevaba siendo "el que alquilaba las tumbonas en la playa", en ese estado de confusión de la hora de la siesta, le venían, como en ráfagas, imágenes difusas de las telas a rayas blanquiazules de las hamacas, el sudor de las latas frías de cerveza, arena pegada en la piel bronceada y sobre todo, una indescriptible sensación de tranquilidad. Suponía que alguno de los gritos iban dirigidos a él, demandándole uno de esos objetos que alquilaba. Poco a poco las voces fueron haciéndose más nítidas, las risas más claras. Oyó su nombre en una voz vagamente familiar, pero fue la patada en la silla lo que acabó por devolverle a la realidad.
- Fernández!!!, una cabezadita más, solo una más y se va a dormir a la puta calle!!!!
Las risas se apagaron, pero las miradas burlonas de sus compañeros de oficina lo sumieron en un estado de abatimiento. La luz cegadora del sueño se convirtió en el frío fluorescente de siempre y en ese momento tuvo claro que era la última siesta que le amargaban. No se molestó ni en apagar el ordenador, se puso la chaqueta y dijo, "me voy, tengo cuatrocientos kms antes de poder terminar la siesta".
11 comentarios:
Retiro mi vista de la pantalla del ordenador. Miro a mi alrededor. Lo tengo decidido:¡¡¡Me voy con Fernández!!!
eh!!! esperarme!!!
Fernández comunica a amigos y a quien le interese, que ha vendido el coche y ha comprado una furgoneta, siete plazas mas los que quepan entre las cajas y maletas, tambien necesitará alguien para ampliar el negocio de las tumbonas y ofrecer bebidas frias, ganchitos, kitkats y otras fruslerias que gustan mucho a los que se torran bajo el sol. A partir de octubre una persona mas para que suministre un ferrero rocher, de esos del anuncio, a cada cliente. Eso si, formando una cooperativa en el que el derecho a la siesta sea sagrado.
Seré una de las que quepa entre las cajas. Por cierto ¿cual es el destino?. Por cierto ¿acaso importa?
Tu amigo el viento, y el evitar los controles de la guardia civil, si vamos con exceso de carga, marcarán el rumbo y el destino. Si no hay ibones, habrá una cala desierta, seguro.
Avispada en el encuentro de los ibones (dígaselo a Fernández), y de la misma guisa para ser fotografiada en la carretera (coménteselo a Fernández también). Creo que con ambas cualidades me he ganado una canción... espero que se escuche desde las cajas.
Me comenta Fernández que como no sabe los gustos musicales de los integrantes de la expedición ha dejado fuera de las cajas un popurrí de jotas, pasodobles, sambas, folklore de Papua Nueva Guinea y uno que ha robado esta mañana en el cortingles de los Dire Straits, por lo visto o les tenía manía( a los del corte) o mucha afición a lady writer, sultans of swing y todos esos temas tan bonitos para salir de excursión. Dice tambien que para que no crean que es un soso y un carca, dejará en las cajas todos los casetes de Adamo, el Duo Dinámico, Marisol y Joselito, pero que los piensa poner en el estereo de la playa para atraer a los turistas.
Hey, hey...heyyy!!!!
¿No vamos a ser muchos?.
Dígale a Fernández; comuníquele por favor que a mi me encanta "Ticket To Heaven"...
Pero cómo?? Fernández ha dejado en tierra al Gran Georgi Dan!!! y su Barbacoa!!
a cambio siempre quedará Lito...
humm, Fernández tiene su propia teoría sobre este personaje, alguien que pasó del jazz(en su juventud, siglo III dc) a cantar, con los ritmos mas infernales y machacones conocidos, a las barbacoas, los muslitos , la gaseosa, lo que puede o no puede el negro, o una vez dormido el mencionado negro, qué era lo que quería, a las muchachitas que se casan con los viejos o a los remeros del Volga entre otras joyas de la literatura musical veraniega, alguien así solo puede ser un elemento terrorista de mucho cuidado. Por no hablar de sus coreografías, peinados, y vestimentas. Lo peor es que acaba consiguiendo su propósito, graba en los cerebros sus consignas y algún día cuando el diga "todos a la barbacoa", como zombies, la población alienada se pondrá camisetas de colores, tops de lentejuelas, se cardará el pelo y saldrá a las calles a incendiar todo aquello que no siga las normas de la biblia veraniega del francés.
Y si no, al tiempo, por si acaso ocurre este verano, Fernández tiene un cd de Miles Davis y 5000 watios para rechazar a los bailongos. (y una recortada), Luego pondrá "suspiros de España" y se tomará una cervecita.
¡¡Fernández!! embrague, 1ª y arranque, yo no miraré "patrás".
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